domingo, 17 de agosto de 2008

Poema "Como la Recuerdo" de la obra Romance del Autor Marcial Figuereo Rosado

Como la Recuerdo

La conocí mientras estaba sentada,
En un banco recreándose en el Jardín
De la Universidad O & M.

Ella estaba derramada en llanto
Cuando me acerqué.
(Esta no era mi Universidad, estaba de visita
realizando una investigación, aplicando una
encuesta, para el trabajo final
De una materia del Pensum
De la carrera de Mercadeo
“Metodología de la Investigación Social”).

Me senté junto a ella
Y dialogamos hasta calmar su llanto.
Ella confió, en mí.
Aún siendo para ella, un extraño
Me confesó, que había sido abandonada,
Por su novio
El cual no le había dado una explicación,
Por eso sentía un gran dolor
Que solo, se calmaba con el llanto.

Compartimos, dialogamos por varios minutos,
Al marcharme ya no lloraba,
Deje en sus labios, una sonrisa grabada
Y en su cuaderno, anoto el teléfono de mi trabajo
De estudiante, en una de la Plaza
Más reconocida, de la Ciudad de Santo Domingo

Me dio el de ella,
Que con el tiempo lo olvidé
Pero hoy recuerdo que empezaba
Con 5 y terminaba en 70

Ansioso espere, su primera llamada,
Fue ese mismo día,
En que la conocí,
Me llamo, en horas de la tarde

Recuerdo, que ella me dijo
Que sentía deseo de verme,
Acordamos que me visitara

Al siguiente día en la Plaza
Me visitó, eran las cuatro o cinco de la tarde.

Le brinde un helado
Se que fue de fresa, ciruela y chocolate.
Su nombre
No lo he olvidado

¡Rebeca! ¡Rebeca!

Su cuerpo,
Como lo recuerdo,
Seria imposible olvidarlo,
Si fue mío, tantas veces
¡Rebeca!

Recuerdo, la primera vez
En que se quedo en casa,
Talvez fue la primera vez,
Que mintió a sus padres,
Pero le confesó, a su hermana
De confianza,
Que pasaría la noche conmigo.

Justo en esa
Noche
Se inicio
La primera entrega,
No de uno de sus besos,
Sino, de todos sus besos
Y de su cuerpo.

Esa noche
¡Como la recuerdo!,
Cuantos besos,
Cuantas caricias,
Nuestros cuerpos
Prisioneros,
Uno del otro.

¡Como, la recuerdo!
Desnuda, en el interior
Del cuarto de estudiante,
Que yo alquilaba,
En la calle 21 del sector de Villa Agrícola,
En la ciudad de Santo Domingo.


Como costumbre
De ancestros,
Puse en la cama
Una toalla blanca,
Debajo de su cuerpo,
Para gravar
Su primera entrega,
Guardo en mi memoria
El recuerdo
Y la prueba
De la entrega,
De su virginidad,
Marcada en unas cuantas
Gotitas rojas en la toalla.

¡Rebeca!
¡Como, la recuerdo!
En aquella noche,
Me dio, el privilegio
De amarla suavemente
Disfrutando,
Mientras inundaba
De besos
Y caricias
Todo su cuerpo, mientras ella
Me entregaba,
Su virginidad.

¡Como la recuerdo!
Con su color trigueño,
Con sus ojos café,
Con sus cabellos cortos
De color castaño claro
Que caían
En sus hombros,
Su estatura era
De unos 5.4
Sus pechos eran hermosos
Desde ese entonces
Así lo recuerdo.

Sus manos suaves y sedosas,
Me apretaban
En ese momento,
En que se entregaba
A la furia, de ese sentimiento
De deseo
Que nos estremecía
Y hacia que nuestra
Respiración
Fuera profunda.

¡Rebeca!
Me diste esa noche,
Que no borrare
Jamás,
De mis recuerdos.

Esa noche
Tuvo tantos detalles,
Suavemente
Empezó,
Aquella entrega,
Casi un mes,
Para unir
Nuestros cuerpos
Por completo,
Dándome
Su virginidad suavemente.

Todas esas entregas,
Dejaron huellas,
Tres meses después
Me confesó,
Que llevaba en su vientre
Una vida,
Fruto de los dos,
Pensé rápidamente
Un hijo, en su vientre,
No lo puedo creer,
Solo tengo 19 años, casi veinte
Y ella talvez 18 años,
No reclamé, porque pasó,
Ambos nos entregamos,
Sin pensar en las consecuencias,
Al principio no quería
Hacerme a la idea.
Pero pronto me acostumbré,
Y me encariñé
Con él.

Soñé,
Verlo nacer,
Pero, a las doce semanas,
Mientras se bañaba
En el río,
En unas vacaciones,
Resbaló,
A consecuencia
Del golpe,
De su vientre
Se desprendió,
No lo lloré
Pero sentí
Una pena
Enorme en mi interior.

Un tiempo después,
Nos distanciamos
Ya no compartíamos,
Con la misma
Frecuencia de antes
Nos fuimos alejando.

¡Como la recuerdo!
La última vez que compartimos
En casa,
Cuando estábamos
A punto de una completa
Entrega,
Alguien toco, equivocadamente,
La puerta
De la habitación que alquilaba,
Luego nos quedamos charlando,
Recuerdo que a partir
De ese momento
Nos alejamos,

¡Rebeca!
¡Como la recuerdo!
A pesar de que hace más
De quince (15) años
Que no la he vuelto a ver
Nunca olvidare sus lágrimas
En aquel día,
Sentada
En el Jardín de la Universidad
O&M, donde la conocí.

La última vez que nos encontramos,
No recuerdo el lugar exacto,
Solo me dijo que estaba de luto.

Porque días después,
De una operación
Su prometido había muerto,
Su prometido,
El cual se llamaba,
Igual que Yo.

No la he vuelto a ver,
Desde hace más de quince (15) años
Me apenas, como en la vida
No he vuelto a encontrarla,
En realidad, no sé donde vive,
Donde esta en este momento,
Pero tampoco,
Se, donde encontrarla nuevamente,
Aunque sea para
Compartir
El recuerdo
De aquellos momentos.

¡Rebeca!
Mi rebeca,
A veces sueño
Que algún día,
Nuestros caminos
Coincidan,
Al visitar la misma Plaza,
Al tomar el mismo autobús
En una de las calles,
De Santo Domingo Norte
O Santo Domingo Oriental,
Pero me lleno de dudas,
Porque hace quince (15) años,
¡15 años!
Que no la he vuelto
A ver.


Seudónimo
Autor: Laicram Odasor
Marcial figuereo rosado

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